Que mejor que una exploración catártica, una profunda conversación musical sobre un cambio de vida colosal, la ambivalencia del deseo, las sutilezas de la autoestima, es lo que nos invita a sentir este ep de Charlie Tonelli. El músico argentino habló con nosotros entre otras cosas sobre como fue trabajar con el ingeniero francés  Benjamin L’Hotelier.

 "Trabajar con alguien como Benj sigue una tradición de Électriciennes que empezamos hace dos años en Miami con Leitvox (Cristian Cooley) en su estudio Bamyasi - es decir, trabajar con ingenieros que se especializan en mezclar música para cine y publicidad."

"Benj es músico (baterista) y siempre es bueno trabajar con un ingeniero que tiene un oído en la parte técnica y otro en la parte más emocional de una composición." Trabajaron en su lugar,que según Charlie, el estudio principal parece el puente de mando de la nave Enterprise de Star Trek,  "su estudio es un sueño. Como músico, uno quisiera quedarse a vivir".   "Nuestras composiciones son muy cinemáticas, y no usamos - o usamos muy poco - instrumentos acústicos - entonces encuentro que esa aproximación a la mezcla más cercana a la producción audiovisual nos ayuda a la hora de contar nuestras historias." 

 Nos podes contar ¿el por qué de tres versiones remixadas: una por el DJ Argentino Javier Penna, una por el productor Brasilero Andrei Fossari y otra por vos? En realidad fue una idea que surge a partir de unas charlas con nuestro sello distribuidor, Heavenly Bodies, que se especializa en Deep House y EDM. Un poco en broma yo les sugerí que tendríamos que haber hecho un track dance para que lo pudiesen promover mejor, y uno de ellos sugirió el contacto con Javier (Penna) para hacer un remix. Yo le mandé las pistas y las grabaciones originales, pero entre una cosa y otra (Shanghai y Buenos Aires no quedan precisamente al lado) el contacto se cortó y yo pensé que el proyecto se había caído - así que para no defraudar a la gente de Heavenly Bodies me puse a hacer mi propio remix (en parte por diversión, pues no es un género que yo consuma mucho). Lo cierto es que al final Javier había seguido trabajando en su versión, así que al final teníamos dos versiones! Cuando se las hice escuchar a Elle Blink, la cantante, ella sugirió una tercera opción, en la dirección opuesta: es decir, más lenta, más ‘lounge’. Andrei es un ingeniero y masterizador de increíble talento con quien trabajé mucho cuando los dos vivíamos en Miami (ahora él está basado en LA y yo en Shanghai, lo que son las cosas) y le pasé las pistas para ver que se le ocurría, y así terminamos con las 3 versiones ‘bonus’ que acompañan al primer sencillo.

Este EP que verá la luz en mayo, tiene inspiración de tu vida en Shangai? Yo creo que, al menos en lo que a mi respecta como artista, es imposible separar las circunstancias personales de la obra. Así que ciertamente mis circunstancias en China permean todo el álbum. Si bien las canciones se empezaron a escribir en NY - muy influenciado por una ruptura amorosa, lo que se escucha claramente en los temas ‘Gone’ y ’To Be The One’ - para cuando empezamos a grabar las voces yo ya estaba en Shanghai, y como todo cambio de vida y ciudad nueva, lleno de un optimismo y energía que se percibe en el disco (particularmente en ‘Just Dropped In’ y ‘Polaroids’). Amén de la parte personal y compositiva, el mero hecho de que todas las canciones son colaboraciones con cantantes viviendo en Shanghai hace inevitable que todo el entusiasmo que yo tenía sea un catalizador de estas relaciones. Mi idea siempre es trabajar con las (o los) cantantes de modo tal que los temas se transformen a través de su perspectiva - es decir, no busco que interpreten ‘mi’ composición, sino que a partir de una narrativa personal mía, ellos encuentren una resonancia de su propia historia, y eleven la canción a un lugar nuevo. Es decir, que sean verdaderas colaboraciones.